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Voge 525 DSX: prueba, fotos, precio y primera impresión

Voge 525 DSX: prueba, fotos, precio y primera impresión

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La marca de motos Voge refuerza su posición en el segmento de motos trail para carnet A2 con el lanzamiento de la nueva 525 DSX.
En 2019 fue cuando se produjo en nuestro país la llegada de Voge, la marca de motos premium del grupo Loncin, que se presentó en España con cinco modelos, entre los cuales la 500 DS representaba la gama trail. En poco tiempo, la 500 dejaría de estar sola en la saga adventure de Voge, con la llegada de otros modelos de 300 y 650 cc, tanto en variantes asfálticas DS como en versiones más camperas DSX, incluyendo la 300 Rally que ha sido una de las motos más exitosas de la marca asiática en el mercado español. Tan solo cuatro años después, Voge presume de una gama con diecinueve motos, tres de ellas incorporadas en el presente curso, como la 125R, el scooter SR4 Max y, ahora, la 525 DSX, que es la protagonista de este artículo. Voge 525 DSX 2023. Estirón Entre las motos superiores a los 125 cc (cuyas ventas suponen más del 50 % del total), los modelos del medio litro son los que más crecen en popularidad y demanda frente a las de mayor cilindrada, y en concreto las variantes de tipo trail y con aspiraciones mínimamente camperas, aunque sean a nivel estético. Es un segmento importante porque no solo faena en caladeros de usuarios con carnet A2, sino que a ellos también se ven arrastrados por la corriente otros motoristas más experimentados llegados de categorías superiores, en busca de mantener el estilo adventure pero ante un conjunto más ligero y accesible. Lo cierto es que estas quinientos son motos cada vez más capaces, vienen mejor equipadas y, por qué negarlo, están disponibles a unos precios que permiten invertir el sobrante en muchas otras cosas, ya sea en accesorios, equipamiento o simplemente en costearse unas cuantas aventuras. La 525 DSX es algo más que una evolución de la 500 DSX, puesto que se puede considerar una moto nueva Voge aspira a reforzar su posición en este segmento con el lanzamiento de la 525 DSX, que es algo más que una evolución de la 500 DSX puesto que en verdad se puede considerar una moto completamente nueva. La mayor semejanza la encontramos en la mecánica, pues aquí sí que se ha partido del anterior motor bicilíndrico fabricado por Loncin, aunque con cuantiosos cambios técnicos y electrónicos. El hardware se ha renovado con un aumento de cilindrada desde los 471 hasta los 494 cc, gracias la variación de cotas internas hasta el 68 x 68 milímetros (diámetro por carrera), frente al 67 x 66,8 mm de la versión anterior. Con ello, se ha conseguido elevar la cifra de potencia máxima hasta los 47,6 CV a 8.500 rpm, apenas medio caballito más que antes y justo al límite de lo permitido para las motos destinadas a usuarios con carnet A2. Más relevante es el incremento de par motor, desde los 40,5 Nm hasta los 44,5 Nm y con una curva más llena desde bajas vueltas, según expone la marca asiática. Pero el nuevo propulsor también marca un buen paso adelante en lo que respecta al despliegue de ayudas electrónicas, puesto que no solo ofrece dos modos de motor sino que también estrena un control de tracción que se puede desconectar. Este supone un detalle con el que la marca asiática quiere destacar frente a la competencia que carece de dicha solución. La horquilla Kayaba ofrece reglajes de compresión, extensión y precarga de muelle. Más variaciones se detectan en el apartado ciclo, que es íntegro de nueva factura, como así se aprecia en una carrocería mucho más moderna y de líneas vanguardistas. Bajo éste se halla el nuevo chasis tubular fabricado en acero al cromo-molibdeno, acompañado de subchasis desmontable y basculante de doble brazo en aluminio. Loncin también quiere remarcar el carácter premium de Voge dotando a esta DSX de frenos y suspensiones de primeras marcas como Nissin y Kayaba, respectivamente. Además, como iniciativa propia del importador en España, la empresa Onetrón, la 525 DSX que se comercializa en el mercado ibérico con horquilla multirregulable, no solo en los hidráulicos de extensión y compresión, sino también en precarga de muelle –único ajuste que permite el amortiguador, que carece de reglajes hidráulicos-. Otro buen detalle es la inclusión de un ABS con opción de desconexión, para mejorar las cualidades camperas, junto a las ruedas de radios con neumáticos Metzeler Tourance tubeless, las defensas de motor y los cubremanetas de serie, el caballete central, el parabrisas regulable sin herramientas… Tampoco viene floja de equipamiento la nueva Voge, pues de serie incluye pantalla LCD de 7 pulgadas con Bluetooth, iluminación LED, faros auxiliares, tomas USB y 12 V y hasta luz diurna DRL que al poner el contacto parpadea en secuancia como si fuera KITT el Coche Fantástico… Y, todo ello, por un precio de tarifa situado en 6.587 euros, pero que se rebaja hasta los 6.187 € como oferta de lanzamiento (hasta 30 de septiembre), en la que también entra la promoción de poder adquirir un kit de maletas y baúl trasero por 650 €. La fácil desconexión del control de tracción y el ABS beneficia la conducción off road. Sin complejos A los mandos de la nueva Voge 525 DSX encontramos un puesto de mandos bien resuelto. Una de sus principales cualidades es la baja estatura del asiento, cifrada en 830 mm, pero que en la práctica semejan menos por la esbelta figura del asiento y el depósito de gasolina, que permiten llegar con suma facilidad al suelo incluso a los usuarios menos altos. Esta configuración, unida a un ajustado peso de 202 kilos, con el depósito de gasolina lleno en sus 16,5 litros, transmite mucha confianza y seguridad. Las piernas también quedan en posición confortable, bien ceñidas al depósito y sobre unas estriberas que quizá puede que estén un poco elevadas de más para usuarios de piernas largas. El manillar propone una posición relajada y todos los mandos plantean un accionamiento suave, incluso los comandos de las piñas, si bien la 525 DSX presenta una indudable pega en la dificultad para ver bien el cuadro de instrumentos en condiciones soleadas -una pena porque en condiciones más oscuras descubrimos una presentación ordenada y mucha información-. El rígido bastidor sorprende por gran estabilidad en vías rápidas El comportamiento del chasis plantea un equilibrio muy logrado. Se trata de un bastidor bastante rígido que ante todo destaca por su sorprendente estabilidad en vías rápidas y en curvas amplias. En carreteras más viradas la Voge se desenvuelve con bastante soltura gracias principalmente a dos factores: por un lado el peso, no solo por estar en 190 kilos en vacío, sino por sentir que está realmente centrado en el conjunto; y también por la bondad de los sempiternos neumáticos Metzeler Tourance, que resultan de lo más noble y predecible. Durante la presentación de la 525 DSX completamos muchos kilómetros sobre carreteras de montaña en mal estado, sorprendiéndonos la confianza que aporta la trail asiática. Responsables de esta cualidad son las suspensiones, que quizá no sean las más brillantes en cuanto confort y sensibilidad ante las irregularidades más pequeñas, pero sí ofrecen el rendimiento y la solidez necesarias para no descomponer el equilibrio del bastidor incluso en conducción alegre. Pese a todo, la respuesta del motor es probablemente la mejor baza que la Voge 525 DSX tiene para destacar frente a una competencia en la que se pueden incluir modelos como la Benelli TRK 502 X, la Honda CB500X, la Macbor Montana XR5 o la QJ Motor SRT 55X. Si bien todas ellas están igualadas casi al dedillo en cuanto a prestaciones, potencia y par motor, la DSX plantea una entrega muy completa y equilibrada, incluso con tintes de parecer una moto de mayor cilindrada. La promoción de lanzamiento incluye un set de maletas a mitad de precio. Cuando tengamos ocasión de comprobar su rendimiento en nuestro Centro Técnico confirmaremos –o no- las sensaciones a sus mandos, pero la Voge transmite sobre todo un medio régimen admirablemente lleno y una gran elasticidad arriba. Lo hace incluso ante un desarrollo algo desconcertante porque la tercera y la cuarta resultan algo largas, pero la quinta y la sexta se notan más cortas de lo ideal. En cualquier caso, la 525 DSX ofrece una mecánica competitiva entre las de su clase, gracias también un nivel de vibraciones y consumos bastante ajustados, un cambio de accionamiento acertado y un embrague suave en la maneta y cuyo mecanismo antirebote se muestra efectivo en conducción alegre. En conducción todo terreno, la nueva Voge se desenvuelve sin mayores problemas que los marcados por la corta distancia al suelo, el recorrido de las suspensiones (150 mm delante y 155 mm detrás) y unos neumáticos más pensados para el asfalto. Salvo por estos condicionantes, la DeSert X propone otros puntos favorables como su ajustado peso, la solidez de las suspensiones, la cómoda posición en pie que permite el esbelto depósito y la opción de desconectar el control de tracción y el ABS. Ajustes que, además, se realizan con suma facilidad, cada uno con su botón específico en las piñas del manillar, pero sin necesidad de bucear en el ordenador de a bordo.